Es por todos conocida la afirmación de “el tinto para la carne y el pescado para el marisco” pero, más allá de esta sencilla regla, el maridaje de los frutos del mar es mucho más versátil. ¿Vienes a nuestro restaurante marisquería en el Barrio Pesquero y quieres disfrutar del pescado y el marisco con el mejor acompañamiento? Te ayudamos.
Elige fácilmente
Para empezar, la regla más sencilla es la siguiente: la grasa y la potencia del sabor del pescado marcan el vino que los debe acompañar. Los pescados blancos como el lenguado, por ejemplo, quedan muy bien con los blancos. Los pescados semigrasos como el bacalao con los rosados y los tintos jóvenes. Y los pescados grasos como la caballa o el atún con vinos rosados frutales.
¿Y los mariscos y crustáceos? Si vienes a nuestra marisquería en el Barrio Pesquero de Santander elige el vino blanco, es la combinación perfecta para ellos. Para las cigalas y los langostinos un vino jerezano o un espumoso y, para las gambas rojas, un vino tinto joven. ¿Y si el pescado va frito o con alguna salsa? Los tintos jóvenes y los rosados secos.
Pero ¿y si prefieres una cerveza para acompañar este tipo de platos en una marisquería en Santander? Pues también quedan muy bien, sobre todo para las frituras. Para el marisco nada como una cerveza rubia. Y si el pescado es blanco y no lleva salsa, no lo acompañes de cerveza, su sabor amargo puede anular su suave sabor.
No obstante, en esto de gustos, como suele decirse, no hay nada escrito y puedes probar diferentes combinaciones más allá de estas normas básicas cuando vengas a nuestro restaurante del barrio pesquero en Santander.
Te esperamos en tu restaurante marisquería en el Barrio Pesquero. Recuerda estas reglas de maridaje y disfruta de los productos del mar con el mejor acompañamiento.